Mis dientes castañeaban a ritmo de lluvia repiqueteando en la desierta carretera. No pasaba ni un alma. Los coches eran ajenos a mis problemas y sentimientos. Mis lágrimas se refugiaban en las gotas que caían por mi pelo enmarañado. No sabía qué hacer, ni qué pensar. Mis recursos estaban anulados por el pánico y congelados por el frio noviembre que pasaba ante mis narices, sin casi verlo.
Continuará...
¡Nos leemos!
¡Gracias por venir!
Surgen en la mente ciertas palabras:
ResponderEliminar- Agonía
- Miedo
- Soledad
- Frío
Kate
Esta bien quiero otro trocito ya ^^
ResponderEliminarCristina:
ResponderEliminardioooss k poetico tiaa te a kedao geniaal cada vez escribes mejor me encantaa!!! ajaj sigue asi espero la siguiente pero ya sabes avisame plis ajjaja k tengo una cbeza... tQ!
Muy bueno!!!
ResponderEliminarMuy bueno en verdad. Voy por el siguiente. ADOL
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