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Lecturas

viernes, 1 de marzo de 2013

La Ciudad

En la ciudad, aquel día amaneció con niebla y encapotado. Igual que en los corazones de ambos. Tanto el chico como la chica, tenían en sus rostros, pintado el sentimiento del dolor. Se echaban de menos y no sabían cómo decirlo.

La joven esperaba en el mismo parque que hace años comenzó a ser feliz. Él se impacientaba por que llegara el momento de volver a vivir: el brillo de sus ojos.

Ella sonrió con una felicidad extremadamente invisible, pero lo sentía cada vez que lo miraba a la cara. Ese nudo en el estómago, esas mariposas chocándose en cada rincón de su interior eran algunos de los culpables de su sonrisa tan estúpida. Sin entender muy bien de donde salió, tuvo el valor de rozarle dos dedos y echar un suspiro en su oído antes de comenzar a hablar. Él se estremeció.

       - Cierra los ojos e imagínate que el mayor de tus deseos se cumple en un instante. El instante que dura el parpadeo entre los ojos cerrados y abiertos.

El muchacho sonrió, cerrando los ojos. Los volvió a abrir y parpadeó. La agarró de la mano y tiró de ella suavemente para sentirla más cerca.

- ¿Qué haces?- preguntó sorprendida la chica con voz acelerada.
- ¡Comenzar mi deseo! y que no termine nunca.

La besó en los labios tiernamente, y estuvieron paseando por las calles de la ciudad sin soltarse. Mirándose y riendo. Sintiéndose cómplices de un amor escondido. Realizando el deseo que ambos soñaron durante tanto tiempo.
¡Nos leemos!
¡Gracias por venir!

2 comentarios:

  1. Cuanto tiempo sin darme un garbeo por aquí. Me gusta, creo que lo hacemos todos. Desear que la persona amada siga a nuestro lado cuando deseamos.

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  2. uy! que me vuelvo a imaginar a cierta persona que no voy a mencionar... Pero no te creas que es alguien que tú conoces!!! JA!
    Ves??? escribes mejor aquí en el blog!

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¡Todo el mundo tiene derecho a dar su opinión sin ser juzgado! ¡Devuelvo comentarios y de paso me alegráis el día! =)