Esas ganas de tirarlo todo por la ventana, de chillar hasta quedarte
sin voz, de llorar hasta que no te queden más lágrimas que derramar… Todo eso
se acumula en la garganta y el estómago, que no te deja ni respirar.
Una discusión y todo se vuelve borroso, taciturno. El punto de vista
cambia y la perspectiva se vuelve radical.
A medida que pasa el tiempo, todo se vuelve un revoltijo de sensaciones,
de sentimientos que no eres capaz de reconocer. Desconoces como puedes aguantar
el peso de todo eso.
Llega un punto en que no continuas… te vuelves punto y aparte.
Decides pasar, erradicar el problema que te hace tanto mal. Y solo
puedes pensar la manera de mejorar; sabiendo que no tienes otra forma mejor de
hacerlo.
¿Qué hacer en ese
tipo de situaciones?
Optas por ponerlo todo en su lugar, acabando con todo. ¿Y qué sientes?
¿Ira y Tristeza?
¿Enfado y Cansancio?
¿Ira y Tristeza?
¿Enfado y Cansancio?
Todo junto nace dos nuevas expresiones, dos sensaciones:
Tristira
y Enfasancio
¡Nos leemos!
¡Gracias por venir!
También valdría Tristenfa e Irasancio ¿no? jajaja :P
ResponderEliminarTe has quedao agusto ¿no? menudas palabrejas!!! anda que...
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